Una pregunta muy frecuente es: ¿cuántas sesiones necesitaré?. Dado el número de dolencias diferentes en las que se recomienda la apiterapia honestamente he de decir que depende de cada caso.

Debes tener en cuenta que siempre me tienes a tu disposición para resolver tus dudas.

Lo más importante de la apiterapia es precisar cómo, dónde, cuando y cuantas picadas debes recibir.

Mi primera visita.

Como persona que practico la apiterapia, no entiendo las visitas de 5 minutos y...el siguieeeeente! Parto de la base de que un paciente bien informado, siempre será un paciente bien curado.

Por eso, para escucharte y trazar un plan de actuación en tu caso específico necesitaremos aproximadamente 1 hora. Mis pacientes necesitan tiempo y atención. Es parte de mi responsabilidad hacia ti. En esta visita, las abejas también “tantean” tus fuerzas, tu estado general y tu grado de dolor, inflamación... Son más listas de lo que a priori nos creemos y gracias a ese tanteo, convierten sus picadas en vehículos esenciales y de gran efectividad para tu curación.

Siguientes visitas.

Seguimos terapia según el plan trazado en la primera visita y observando el desarrollo del proceso de curación, a veces modificamos algo.

En la segunda sesión, te explico cómo puedes “expulsar tu enfermedad” o dolencia. Curiosamente, tras el miedo de la primera sesión, mis pacientes ya hablan cariñosamente de “sus abejitas”, pues han comenzado a sentir sus beneficios. En cada una de las sesiones, cambiamos impresiones de cómo te encuentras. A veces es el propio paciente el que me dice “pícame aquí”, pues con la práctica de las primeras sesiones ya sabe dónde encontrará alivio.

-¿Qué se siente cuando te pica la abeja?

Aunque no se puede generalizar, pues hay personas que sienten alivio, en general, la sensación es la de cualquier inyección. Inmediatamente después puedes notar como la sustancia del veneno de la abeja “viaja” por la zona para ir a alojarse en el punto exacto donde tu cuerpo lo requiere, actuando así contra el dolor o la inflamación. Al cabo de unas horas, comienza la sensación de que te ha rozado una ortiga, lo que también tiene alivio si sigues los consejos que te daré.